lunes, 14 de octubre de 2013

La garúa se Bracacielo (2)


En esa finca transcurriría buena parte de esta historia.
Pero, por empezar por el principio, Federico Barrientos no conoció a Ronnie San Bonifacio en su finca de Ávila, ni siquiera en Madrid -ciudad a la que el bilbaíno Barrientos acudía con relativa frecuencia-. Debía ocurrir esa circunstancia en Vitoria. Parlamentario vasco, la sede central de esa institución se encontraba en la capital alavesa- y un compañero de colegio, nacido como él en Bilbao le invitaba a compartir almuerzo con Ronnie y otros comensales.
- Es un tipo muy interesante -le dijo.
Pero apenas si pudieron cruzar una palabra. Quiso la distribución de la mesa que Barrientos ocupara una de las cabeceras y Ronnie la otra. El resto lo cubrían un grupo fraternal de masones -Ronnie lo era también- que emplearon el almuerzo en desarrollar cuestiones de interés común.

Por ese motivo, la oportunidad del conocimiento verdaderamente tal tuvo que esperar algunos meses. Los que mediaron entre esta primera comida vitoriana y la segunda, que tendría también lugar en la capital de la Comunidad Autónoma vasca.
Se produjo esta como señal de agradecimiento de un grupo -en el que también se encontraba San Bonifacio- ante  la gestión realizada por Barrientos con su compañero de partido y alcalde de la ciudad de Vitoria, por la cual Ronnie podría exponer una muestra itinerante de su propiedad en un edificio oficial.
- Te invitamos a comer -le dijo Mireia.
Mireia Algorteberri era una mujer que se situaba en sus relativamente aceptables 50s. Morena, la estatura corta y la expresión amable -aunque escondiera esta ultima cierta mala uva, que era característica de muchas mujeres de aquel país-. La "neska" había conseguido, por mediación de su novio, un contrato con San Bonifacio para que esta le asistiera en la promoción de sus actividades culturales, gestión para la cual Mireia carecía de especiales aptitudes, pero por la que recibía una remuneración, poco razonable, dadas sus personales circunstancias.

No hay comentarios: